lunes, julio 31, 2006

Gargorimbos espaciales


Quizás, algún día, cuando el tiempo deje tras de sí a miles y miles de civilizaciones como la nuestra, algún ser en algún lugar de algún universo, será capaz de interpretar el código correctamente; y se imaginará entonces que nuestra intolerante civilzación oriunda de un "lejano charco de lodo", fue incapaz de soportar todo aquello que le resultara diferente, y prefirió destruirlo que entenderlo.

Se imaginará que fuimos incapaces de convivir con aquellos que son diferentes a nosotros, que fuimos necios en cuanto a pensar que las cosas debían ser como nosotros las pensábamos.

Pensará que siempre tratamos de imponer, de obligar. Que quisimos que todos persiguieran nuestros ideales, practicaran nuestros valores, tuvieran fe en nuestros dioses y rechazaran a nuestros demonios.

Pensará que siempre quisimos establecer nuestra forma de vida como la única vía, aún a costa de la vida de otros muchos.

Y entonces se preguntará si sería posible que tal civilización existiese todavía, y se responderá de inmediato, que una sociedad con tales características no pudo sobrevivir por mucho tiempo, y que es un milagro grandioso el hecho de que él, algún ser en algún lugar de algún universo, pudiera encontrarse con un texto de un mundo en vísperas de su extinción.

jueves, julio 27, 2006

Rojo

De la serie "máquinas violentas"
Photoshop CS2 sobre pantalla

Venía manejando rumbo al trabajo y entre tanto tenía una conversación con el buen Manfred, ese simpático viejecito gruñón (si no saben quién es, lean su ficha http://sala-de-gurgencias.blogspot.com/2006/06/demonio-interno-ii.html).

Estábamos hablando de ti, grandísimo pedazo de mierda, lucubrábamos sobre el momento en el que el mundo de las suficientes vueltas para ponerte al alcance de mis garras. En ese momento lleno de deliciosa justicia, no creas que me pondré a pensar o a imaginar qué hacer contigo, no será así, no habrá improvisaciones, no habrá espacio para errores; sabremos exactamente lo que viene, tendremos planeado un exacto y eficiente sistema para causarte mucho, mucho daño.

Al principio los seres que fingen quererte se preguntarán si pediré un rescate por ti, pero no me interesa tu dinero, para mí no vales ni los kilos de hueso y pellejos que tuvieron la desgracia de recibir tu puñetera alma inmortal. No habrá llamadas, no habrá negociación; porque la única satisfacción que busco es la de darte una muerte como la que te mereces.

Te mantendré vivo todo el tiempo que me sea posible, te alimentaré con tubos oxidados, haré que te cagues y te orines y te vomites una y otra vez sobre ti mismo. Y te haré comer tus propios desechos, y los míos, y los de un perro. Y así será todos los días que me ponga hospitalario contigo.

¿Preguntas si te moleré a golpes y patadas hasta sentir cómo tus ancianos huesos se despedazan entre tu carne? ¿Cuántas agujas te meteré en los ojos? ¿Con qué químicos salpicaré tu piel? ¿Ordenaré a un perro que te coja? ¿Preguntas si te freiré los testículos con los cables de mi coche? ¿Si te los aplanaré a martillazos? ¿Pondré a una rata a cavar un túnel a través de ti? ¿Te introduciré la peor clase de instrumentos por el culo? ¿Te empalaré? ¿Te sentaré en una cuna de judas?

Si te preguntas eso, creeme que no tienes idea de lo que soy capaz.

Al principio me pedirás de rodillas que te deje, que te libere, me pedirás perdón mientras me besas las botas. Pero seré tan sutilmente cruel, que no habré siquiera empezado cuando comiences a suplicarme que te mate de un puta vez.

Llegará inevitablemente el momento en el que te sea humanamente imposible aguantar más, y espero entonces eructar satisfecho del horror que te he hecho pasar. No creas que te incineraré, o que seré tan vulgar como para enterrarte o tirarte a un barranco. Claro que no, te tiraré a las puertas de tu hogar, para que tu familia pueda saber exactamente qué te ocurrió, quizás les incluya un DVD.

Y como no creo que necesiten tu cabeza con expresión de terror para descubirlo, esa se la daré a Porfitas para que se la almuerce. (si no saben quién es Porfitas, pues lean su ficha http://sala-de-gurgencias.blogspot.com/2006/06/demonio-interno-iii.html).

Cuidate, cuidate de mí y de todos mis demonios, porque los liberaré justo en cuanto te tenga enfrente, y no habrá poder humano capaz de detenerlos. No vas a saber ni por dónde ni por qué llegamos, pero vaya que lamentarás todo lo que hiciste en tu perra vida.

Qué tan mierda serás cabrón, que tan sólo pensar en el exquisito placer de hacerte sufrir de esa forma, lejos de causarme remordimientos, me hace sentir como una buena persona.

Ahora me devoraré un snickers, tanto sadismo me causa hambre.

miércoles, julio 26, 2006

Individuo masa

La masa como poderosa influencia en el comportamiento y el pensamiento del individuo.

El hombre es un ser social, un zoon polikon de acuedo a Aristóteles, mismo que dijo alguna vez “el hombre que está sólo, es un dios, o es una bestia”. Siendo así, el hombre desde su primer respiro de vida vive adaptándose a ciertos patrones y conductas inculcadas por su familia, que es la unidad mínima de la sociedad. A partir de esto, de su impronta genética y de su experiencia, el individuo va forjando su personalidad, va seleccionando desde sus amigos y sus gustos hasta sus principios y valores.

Sin embargo, al mismo tiempo que el hombre es insertado en la sociedad, es también insertado en un fenómeno inherente a la misma: la masa. Esta forma de vida tiene su propio comportamiento paralelo al de la sociedad, un comportamiento primordialmente irracional y carente de sentido, que afecta poderosamente al individuo. El objetivo principal de este texto, es hacer una reflexión sobre la influencia que la masa puede tener sobre el individuo, particularmente en su comportamiento y en su pensamiento.

La masa puede definirse como un agrupamiento social carente de organización. Acudiendo a las propias raíces, nos damos cuenta de que etimológicamente, masa aparece en el castellano entre los años 1220 y 1250 proviene del latín massa que significa “amontonamiento, pasta”, es decir, un todo homogéneo, indiferenciable en sus componentes y amorfo en sus contornos, y solamente comprensible en su sinteticidad, no analizable, caótico, un puto desmadre.

Masa es un término más “masivo” que muchedumbre o su cultismo multitud (del latín multus, muchos) cuyas partes, por muchas que sean, se pueden desagregar una por una y, por supuesto, practicarles una psicología individual por separado. La masa a la que me refiero es precisamente ese todo diferente a sus partes, dentro del cuál, éstas pierden sus características fundamentales para adoptar, sin darse cuenta, las características de esta extraña creación.

Distinto a lo que podríamos pensar, para estar insertos en una masa, no es condición necesaria ni suficiente, el estar rodeado de mucha gente, vamos, ni siquiera tenemos que estar acompañados para sentir en nosotros ese comportamiento masivo, ya que esta nos envuelve no precisamente de forma física, sino fundamentalmente de forma psicológica. Nos influye, e influye nuestra forma de vida de una forma muy importante.


En 1930, se publica La rebelión de las masas, la clásica obra del pensador y excelente escritor español Ortega y Gasset. En lo que sigue del siglo el concepto de masa es incorporado y desarrollado profundamente por el pensamiento filosófico y sociológico, en general con la connotación de pérdida de identidad para el individuo a la vez que de adquisición de una capacidad para realizar actos que no realizaría estando solo.

Originariamente, la masa requería la presencia física de los individuos reunidos, se requería para considerar a la masa como tal, el conjunto numeroso de individuos que pierden las fronteras de su propia personalidad entre la muchedumbre presente que los cobija. Sintiéndose así sólo un ladrillo más en la pared, y al mismo tiempo, gozando de los poderes, la protección y la fuerza de la pared misma.

Estando juntos, conglomerados en el mismo lugar, inadvertidos por la homogeneidad del grupo somos capaces de ser más aventurados en la realización de actos irracionales, o bien, nos sentimos extrañamente cómodos llevándolos a cabo.

Una sola persona bailando “Caballo Dorado” se ve como un idiota; pero un grupo suficientemente grande de idiotas bailando lo mismo, se sentirá a salvo de las críticas e incluso, estará en posición de criticar y cuestionar a “esos pinches aguados” que no están brincando como imbéciles.

Mas cuando adviene la revolución de la comunicación, con la radio y la televisión y todo eso, el individuo, como ya explicamos, no precisa ya encontrarse físicamente en una situación de masa para incorporar las características de la masificación, tales como, por ejemplo, la pérdida del criterio personal, la asimilación de odios y afectos inexplicables, frenesíes eufóricos, violentos, dramáticos, adopción de instintivos dogmas de fe, la compra compulsiva de perros afeminados, etc.

De ésta forma, el individuo encuentra una forma pasiva pero cómoda de llevar un estilo de vida, ya que siente la seguridad de hacerlo en función de lo que "se dice" y de lo que "se hace". No tiene la responsabilidad, ni la obligación, ni es tampoco proclive a la muy probable frustración de emprender caminos diferentes, pues ya todo está dado de facto, los caminos están trazados frente a nosotros y no tenemos mas dificultad que la de seguirlos exactamente como los siguieron nuestros ancestros.

Actuando como actúan todos a nuestro alrededor, aspirando a las mismas cosas y emprendiendo su búsqueda a través de los caminos probados por todos, serán realmente muy pocas las dificultades que encontraremos para conseguir nuestro ideal de vida. Que es el mismo de todos los demás.

Claro, la dificultad radica en el hecho de aspirar a algo distinto, de no ser afecto a las mismas cosas que todos los demás. Habrá quien no le vea beneficio real al hecho de estudiar una carrera, o a quien no le llamen la atención las ofertas de Liverpool, quien no quiera casarse y reproducirse, quien no quiera TV por cable y a quien le cague el café descafeinado.

Pero basta con una simple excentricidad como ésta, para que la masa que decidiste abandonar, te tache de desadaptado, de antisocial, de conflictivo y hasta de miembro dañino y nocivo para la forma de vida estándar. De ahí, que nos vemos en la penosa necesidad de aceptar concesiones que limiten nuestra individualidad, y muchos lo hacen a tal grado, que terminan sus días frustrados porque compraron un ideal de vida que en realidad, quedó lejos de ser satisfactorio, y cuya garantía expiró.

Ese es el punto álgido de lo que quiero decir, vivimos en un entorno que busca la masificación, imponiéndonos patrones irracionales y ambiguos, imponiendo formas de comportamiento estúpidas que en muchas ocasiones se confrontan directamente con nuestra individualidad, llegando incluso a crearnos toda una imagen en ocasiones desfavorable de nosotros mismos, al ser incapaces de entrar en ese rol que nos han dado. Es entonces que debemos tomar una decisión, o seguimos lo que nos dice la masa, por más que nos llegue a lastimar, o nos volvemos inadaptados.

Pero cuidado, no crean que se salvaron los que votaron por el peje y quemaron su tarjeta Liverpool; también esos que se dicen rebeldes y gritan “éste puño sí se ve”, y se ponen camisetas del che, y están en pro del anarquismo, y hacen marchas contra el puto neoliberalismo y claman por la revolución y todo ese desmadre, esos también son masa, la masa de los que no están de acuerdo con nada.

Seguir códigos preestablecidos que no te hacen feliz, y que no tienen ningún sentido para ti, con tal de pertenecer a un grupo, te convierte en parte de una masa, la masa que te obliga a seguir éstos dogmas estúpidos. Y es que ahora ya hay grupos para todo; sin importar lo exótico que seas, ahora con Internet es posible encontrar más desquiciados como tú. Si te excitas observando Yorkshire Terriers disfrazados de power rangers fornicando con mapaches ciegos, prepárate, porque pronto, encontrarás un sitio en Internet llamado apropiadamente www.mightymorphinyorkshirerangersfuckingblindracoons.com


A la mierda con el sentido de pertenencia, el triunfo del individuo será la elaboración completa y madura de sus propios códigos de conducta. La masa influye al individuo al grado de hacerlo pensar que lo establecido por ella es lo correcto, obligándolo prácticamente a trazar su plan de vida en función de éstas reglas, de éstos esquemas probados. Claro que el individuo puede decidir si atiende o no a las órdenes de la masa, pero de no encajar en la misma, será tachado de excéntrico e incluso, de peligroso.

Mi consejo sería éste: si no te importa mucho lo que digan de ti, y tienes ganas de descubrir qué se siente llevar tu vida de otra forma, si tus aspiraciones son ligeramente distintas y te sientes seguro de que si la cagas sabrás cómo resolverlo, entonces manda a la mierda a la puta masa y haz lo que se te pegue la gana con tu pinche vida. De cualquier forma, a la masa no le importamos un carajo.

martes, julio 18, 2006

Los Gargorimbos

Érase una vez, en un lejano charco de lodo, un reino habitado por unos simpáticos y apestosos seres llamados “Gargorimbos”.

Los Gargorimbos eran seres muy alegres, muy festivos y eso sí, muy devotos. Cada año celebraban el día de la putrefacción, donde daban gracias a Dios por todo lo bueno que les había pasado en el año.

En esas fechas, las casas de las familias gargorimbas se llenaban de felices adornos hechos con pedazos de insectos y pequeños trocitos de excremento. Justo la noche del festejo, el rey gargorimbo (un tipo muy apuesto por cierto, con el cuerpo lleno de envidiables verrugas) presidía una ceremonia donde se hacía vomitar a un enorme sapo.

Cómo se divertían los niños gargorimbos jugando en el viscoso licuado estomacal del sapo, decían que era de buena suerte encontrarse con algún pedazo de mosca o de mosquito. Era muy divertido ver a los pequeñines chapoteando, ver sus inocentes caritas dulcemente cubiertas de purulentos granitos y pequeñas verruguitas supurantes.

Una vez, un pequeño gargorimbillo le preguntó a su papá --¿Cómo es Dios papito? ¿es bonito?- el padre, dejando a un lado la tradicional pata de hormiga que con gusto devoraba, le respondió – Ay pequeño gargorimbo, por supuesto que es bonito, es hermoso como nosotros. Todos en el mundo estamos hechos a su imagen y semejanza-.

Todo era felicidad en el reino gargorimbo, hasta que un día, a la mañana siguiente del festejo, en medio del vómito apareció un ser repugnante.

Era un ser de largos y sedosos pelos dorados, con perturbadores ojos azules, raquíticos dientes blancos y chatos y cubierto de una repugnante piel rosada completamente castrada de verrugas.

Los gargorimbos atemorizados, horrorizados por el desagradable engendro, decidieron ir de inmediato a dar aviso a su monarca, para que les dijera qué debían hacer.

- Un ser tan repugnantemente diferente a nosotros debe ser obra de una fuerza maligna-

Los Gargorimbos ahogaron al ser en el vómito del sapo para purificarlo, le arrancaron la piel y los ojos y lo dejaron desangrándose a la intemperie. Entonces vieron que ésto era bueno, pues conforme fueron pasando los días, el ser se fue haciendo más y más hermoso…

Hasta que finalmente desapareció entre los gusanos.

- Hicimos lo correcto – pensaba el rey gargorimbo.

sábado, julio 15, 2006

Rosa

De la serie "máquinas violentas"
Photoshop CS2 sobre pantalla
Decía Picasso que todo acto de creación es en primer lugar un acto de destrucción; la destrucción nos hace descubrir la verdadera naturaleza de las cosas, nos hace comprender de qué está hecho el mundo. Como Celso o el mismo Galeno y sus procedimientos de exploración en criminales, soldados y gladiadores heridos. No tendriamos Anatomía ni Cirujía en nuestros días de no ser por ese par de sádicos.
Destruir con el fin de crear algo el un acto plenamente justificable, y en muchos casos, ampliamente necesario. Sin embargo, existe en el hombre esa extraña fascinación por la destrucción tal cual, la calamidad como un fin en sí mismo.
Sobre todo, ese extraño placer se experimenta cuando tenemos la oportunidad de destruir algo que pudo habernos conmovido de manera increible, algo que pudo habernos hecho felices. Es un placer de esos feos, de los que no duran ni siquiera el instante completo de su ejecución, de esos que te hacen sentir culpable, porque fue generado desde la peor parte de ti mismo.
¿No podemos tolerar la dicha? ¿No somos capaces de soportar la belleza? ¿Tenemos miedo de ser felices puta madre?
Quizás se deba a que las cosas lindas nos recuerdan lo enormemente miserables que somos, lo grandiosamente horrorosos que nos sentimos. Matando lo bonito a nuestro alrededor quizás intentamos desesperadamente aniquilar lo malo que hay en nosotros. Y eso sinceramente es una mierda.
Yo soy muy feo, y he destruido muchas muchas cosas hermosas.
I felt like destroying something beautiful
Puta madre
puta madre
puta madre

miércoles, julio 12, 2006

Titerino de tal

Todo transitaba totalmente taciturno. Trataba de terminar con tantísima torpeza este terrible Titerino de Tal.

Titerino taciturno de Tal, tan tarado, tan taimado, tan tonto, tan de Tal. Trivial sería tratar de tipificar o tipografiar o tecnificar tanta tarugués de Titerino.

Teoricemos tantito de Titerino T de T, también tratado como triple T (T punto T punto T punto).

Triple T tiene tres tipos de talento: Tarado, tonto y tierno; con t de terror.

Te lo tengo que traer pa que lo trates.

No lo toques, te trae tirria.

No lo tientes pues se tuerce.

No, no trates de no temblar, ya es tarde.

Titerino trae todos tus temores por dentro.

martes, julio 11, 2006

De la luz a la sombra

La terrible naturaleza del genio


Como muchos, fui de los que se sentó en un sillón con cerveza en mano para ver la "Granfinaldelmundial". Pero más allá del triunfo de la escuadra italiana, de cómo se pararon en la cancha los equipos, de cómo se fueron dando las acciones, los goles, y todas esas vicisitudes; lo realmente importante es que pude sacar alguna reflexión de tan bárbaro placer.

Zidane, un perfecto ejemplo de lo que yo considero como un genio, llega a su retiro de la forma más escandalosa que pudimos haber imaginado. Zidane el pausado, el que es capaz de controlar el ritmo de un partido, como un verdadero director de orquesta, capaz de las más finas ejecuciones.

Poco sé de futbol, y por lo regular ni me gusta. Pero hay que reconocer cuando existen hombres fuera de serie, que en su disciplina son verdaderas encarnaciones de seres ultraterrenos capaces de fascinarnos, de conmovernos y de perturbarnos.

La manera en que Zidane se desempeñó durante el mundial me hizo sospechar que ese hombre era un genio. La forma en que cobró ese penalty en plena final casi me convenció, porque sólo alguien con los huevos muy grandes y la cabeza muy fria pudo cobrar de esa forma.

Pero lo que confirmó mis sospechas, lo que me dio razones suficientes para dar mi conclusión final, fue la tremenda violencia con la que el llamado Zizou estrelló su craneo contra el corazón de su rival.

Esa es la terrible naturaleza del genio, son seres extremadamente bipolares, son seres de largas piernas acostumbrados a caminar entre cumbres; y que cuando caen, lo hacen desde alturas inconcebibles, alturas que ningún simple mortal soportaria.

El hombre normal sabe que en la vida existe la posibilidad de ganar o de perder, de mil estilos formas y colores. Como campeón sin corona se puede ganar perdiendo, como Felipe Calderón (cero legitimidad) se puede perder ganando. La diferencia es que para el genio existen las mismas mil formas de perder, pero solamente una forma de ganar.

El genio puede ir por la vida perdiendo, perdiendo en todo, perdiéndolo todo a su alrededor. Pero con una sóla vez que triunfe, lo hará de tal forma, que sin importar todo lo terrible que pudo hacer en su vida, pasará a la historia como un grande, como alguien que fue capaz de ir mas allá.

El mundo olvidará sus vicios, sus amantes, sus fetiches. El mundo será capaz de olvidar el daño que pudo hacer como persona porque ha logrado trascender como un héroe. Absolvo ta peccatorum porque le has dado a la humanidad el privilegio de saber de ti, y de fascinarse con tu obra.

Así hemos perdonado siempre a nuestros genios, esos inestables seres, incapaces de soportar su propia naturaleza, siempre locos de sí mismos, siempre llenos de furiosa fuerza dispuesta a crear y a destruir a destajo. Son los seres más terribles quienes nos han entregado las obras humanas más hermosas.

Esa es la terrible naturaleza del genio, que va de la luz a la sombra en pasos muy cortos. Pero cuyas luminosas obras alcanzan y sobran para lavar los pecados de su oscuridad.

viernes, julio 07, 2006

Dos instantes


Estoy exactamente a dos instantes de caer en una profunda depresión.

Dos instantes.

En el primer instante me daré cuenta de todos los errores que he cometido, y por primera vez llevaré a cabo el extraño ejercicio de arrepentirme. Observaré mi ser desde una perspectiva distinta, y me percataré de lo que soy, y de todo lo que me faltó por ser.

En el primer instante admitiré que en verdad fui más mediocre de lo que pensaba, pues finalmente no soy más de lo que era antes. Soy mucho menos, se ha consumido poco a poco la supuesta fuerza. Una fuerza de dientes para fuera, un poder virtual que inventé para todos hasta que yo mismo cai en mi propia mentira.

"No soy ese grandísimo cabrón que yo creia", pensaré en el primer instante.

En el primer instante pensaré en todas las posibilidades y consecuencias posibles de cada una de las cosas que suceden ahora mismo, sólo para descubrir lo lejanos que se encuentran los buenos puertos. Pensaré en todo lo que ocurre, en todo lo que está por venir.

Y finalmente, en el segundo instante me daré cuenta de que no puedo con ello. De que le quedé muy chiquito a mi visión, de que fui rebasado enormemente por mi propia invención de mí mismo.

Ahora estoy triste...


Y ni llorar es bueno.

miércoles, julio 05, 2006

Demonio interno IV

Yako el lagarto



Si me gustaran los eufemismos, diría que el así llamado Yako es la deidad pagana interna de la "fertilidad", pero la verdad es que éste vulgar reptil representa al sexo, la lujuria, la perversión, la depravación. Es, para acabar pronto, un pinche cerdo.

No alcanzarían a ennumerar cada una de las parafilias de las que goza ésta maldita lagartija, muchas de ellas seguramente no han sido tipificadas todavía, y espero que nunca tengan que ser estudiadas por nadie; finalmente a él no parecen afectarle. Personajes como Jeffrey Dahmer, Henry Lee, Charles Manson y Jhon Wayne Gacy se refirieron a él alguna vez como "pinche cocodrilo loco". El mismo Señor Sade se ofendió al leer el comentario que hizo Yako acerca de los 120 días de sodoma, pues consideró la opinión del reptil exageradamente procaz y degenerada. "Esas ya son cochindadas" dijo el ilustre escritor.

Durante el dia, Yako lleva una vida perfectamente normal, es un exitoso hombre de negocios (una fábrica de mazapanes, dos edificios de departamentos y como veinte oxxos). Le gustan las ensaladas, sobre todo las que tienen quesos o cuadritos de pan tostado. Su principal pasatiempo es jugar scrabble, le encanta la playa, bebe whiskey johnnie walker y considera que la política fiscal de éste país es una mierda (con todo y todo, no evade impuestos).


lunes, julio 03, 2006

Chiquita

Te amo

No sé qué más decirte,

Soy un maldito perro con suerte por estar contigo, y sólo me lo explico por el hecho de que algo demasiado bueno hice en alguna vida pasada (no me imagino qué pudo ser).

Gracias, gracias por ser todo lo que eres. Por no abandonarme ahora, por no abandonarme nunca y por quererme a pesar de lo mentalmente enfermo que estoy.

El mundo se ha puesto difícil, la vida se ha puesto dura, y lo que me sostiene y me da fuerzas y motivo eres tú. Sé que te he quedado a deber muchísimo, que me he portado mal, que no he tenido detalles y eso, y que he estado estresado y con un humor como de fiera. Sé que... sé que para variar te mereces algo mejor. Y por no sé qué razones sigues con éste pendejo loco.

La única explicación que se me ocurre es que me amas, estoy seguro de lo mucho que me amas. Ahora sólo me queda la responsabilidad de demostrarte con todas mis fuerzas lo mucho que yo te amo.

Tonto Gur, tonto Gur que no es capaz ni siquiera de comprarte flores todos los días. Tonto Gur que no es capaz de escribirte miles y miles de cosas bonitas y se la pasa escribiendo puras babosadas.

Tonto Gur, que a veces se olvida de lo especial que eres. Pendejo Gur que a veces se le olvida lo mucho que luchó por estar contigo. El sueño que cumplí al por fin estar a tu lado, el sueño más bonito que he soñado.

Eres, simplemente, lo mas lindo que me ha pasado en la vida.

Y pase lo que pase con nosotros, nunca terminaré de darte gracias por salvarme de mí mismo, y nunca terminaré de agradecer cada segundo que pudimos volar, soñar y amar juntos.

Te amo,


carajo



te amo tanto Chiquita, mi eterna Chiquita...